Jueves por la tarde, conversación con una amiga, reflexión sobre la vida. Gimnasio esta tarde, alguien sin llaves esperándome en casa. Recuerdo que me dijeron que era una insatisfecha, recuerdo tantas cosas que me han dicho. Recuerdo pasiones pasadas, recuerdo sensaciones, recuerdo a la madre de esta amiga que está en al uci. Recuerdo cuando escribía todos los días y las palabras fluían sin pesar, sin costar. Recuerdo cuando lo que más me importaba era tener pareja, era estar delgada. Recuerdo cuando no tenía ni idea de esta movida del desarrollo espiritual y lo que supone sentir un vacío enorme que no se llena con nada. Hoy me han dicho que querían que pasase el día. Otra me ha dicho que no quiere que pase la vida, que cada día que pasa le da pena y quiere estirarlo y estirarlo. No quiero hacer reflexiones sobre nada porque llevo trabajando un año en no aturrullarme con pensamientos desgastadores. Esta tristeza no sé de dónde viene, no sé dónde me llevará.